Desde la Edad Media (S.IX) y siglos posteriores, miles de peregrinos de los más diversos países han recorrido esta ruta hasta llegar a Santiago, escuchando a su paso por los floridos campos, arcaicos pueblos y bucólicas aldeas, siempre estas palabras de ánimo que hoy día siguen resonando en los diversos rincones de esta hermosa senda: ”Buen Camino, Peregrino”.
CAMINO TRADICIONAL
El desarrollo en el siglo XX de España y Portugal, con la gran mejoría en las comunicaciones y los medios veloces de transporte, no ha afectado en esencia a estas antiguas rutas rurales que se conservan a pesar de la modernidad.
El sentido espiritual, de búsqueda de uno mismo, además de otros valores del camino de Santiago como el encuentro con los demás, sumergidos en el increíble paisaje de la España rural y un cuidado patrimonio cultural, han permitido perpetuar unos trayectos que de otro modo difícilmente hubieran sido preservados.
El tradicional camino se realizaba a pie o a caballo, aunque ahora se ha introducido un nuevo medio reconocido como es la bicicleta, en un momento en el que la experiencia atrae por igual a religiosos, deportistas, estudiantes y turistas.
DIVERSAS POSIBILIDADES
Para aquellos que disponen de poco tiempo para realizar esta hazaña, diremos que a pie o a caballo basta con realizar 100 km para recibir la Compostela, y 200 kilómetros si es en bicicleta. También se puede realizar en silla de ruedas sin motor en caso de invalidez.
La Compostela es una carta o acreditación de haber realizado la peregrinación por motivos religiosos hasta la tumba del apóstol, expedida por el Cabildo de la Iglesia de Santiago. Se consideran estas distancias el mínimo para que haya habido expiación por nuestras culpas, que es el sentido original del camino.
Desde este mínimo, digamos que no hay un máximo. Un peregrino podría partir desde la puerta de la Catedral de Santiago de Compostela, pasar por Finisterre en barco, cruzar América, dar la vuelta al mundo pasando por las antípodas de Galicia (Nueva Zelanda), regresar por Asia, hasta entrar en Europa y llegar de nuevo a Santiago.
Esta sería la ruta desde el lugar más distante, más de 20.000km por tierra y mar, pero tal vez no el camino más largo. No todo el mundo camina en línea recta. Hay quienes caminan toda una vida y al cabo de los años aparecen por Santiago.
EL CAMINO FRANCÉS
En esta serie de artículos vamos a indicar en detalle la tradicional ruta que cruza la península desde el Pirineo Aragonés hasta Santiago de Compostela, contaremos algunas anécdotas del camino, además de dar algunos consejos sobre los preparativos previos a realizar la aventura, consejos a seguir en ruta y opciones una vez que se termina en destino.
También comentaremos como esta vía llamada el camino aragonés confluye en Puente la Reina, con la popular senda que viene de Roncesvalles, que por su peculiar belleza y propaganda es más transitada que la más antigua que llega desde Francia entrando por Aragón.
Contaremos anécdotas, llenas de vida, emoción, sentimientos y magia, sobre todo magia, porque si hay una cualidad que viene como anillo al dedo a este ancestral recorrido es la Magia, del Hermoso Camino a Santiago de Compostela.
